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Todo lo que debes saber sobre economía circular

En España, el proceso de fabricación de bienes y servicios está basado en un modelo lineal donde la producción se plantea para usar y tirar. Este enfoque busca el beneficio económico sin tener en cuenta la huella ambiental y sus consecuencias.

Los recursos del planeta son limitados, por lo que es vital actuar para transformar la economía lineal en economía circular.

La economía circular en un sistema de producción basado en la reutilización, reparación y reciclaje. En la práctica se traduce en aprovechar los recursos, darles una segunda vida y devolverlos al mercado con una forma nueva, minimizando así el coste ambiental.

Es decir, usar de forma responsable los recursos, alargando su vida útil, para proteger el medio ambiente y luchar contra el calentamiento global y el cambio climático.

  • Protege el medioambiente: Se ralentizan el uso de los recursos naturales, limitando la pérdida de biodiversidad.
  • Favorece la independencia de los recursos: Se minimizan los riesgos asociados al suministro de materias primas como la volatilidad de precios o la disponibilidad y dependencia de importaciones.
  • Fomenta el empleo: Estimula el desarrollo de un modelo económico más competitivo, que impulse la innovación, el crecimiento económico y, por tanto, el empleo.
  • Beneficia la economía local: Atrae inversiones y facilita el acceso a nuevas fuentes de financiación. Se trata de una oportunidad de negocio que ayuda a generar sinergias, permite generar nuevas líneas de negocio.
  • Minimiza los costes y acelera el crecimiento empresarial gracias a una mejora del rendimiento económico. Además, mejora la reputación de la compañía y la satisfacción de los grupos de los consumidores.

Es necesario que la organización se comprometa a la integración de un modelo circular a lo largo de toda la cadena de valor. Para ello, el primer paso es recopilar datos para conocer la situación de la empresa. Establecer objetivos específicos y cuantificables con límites de tiempo. Establecer indicadores para medir el progreso. Y, por último, comunicar las acciones tomadas por la empresa para la implicación de todos los grupos de interés.

Algunos ejemplos de acciones que se pueden aplicar:

  • Reutilización y segundo uso: Alargar la vida útil de los productos a través de su reincorporación en el mercado. Se debe apostar por productos de larga duración y limitar los productos desechables.
  • Reciclaje: En el caso de que no puedan ser reutilizados, deben ser reciclados para dar un nuevo valor a sus materiales.
  • Reparación: Los productos deben ser diseñados de manera que puedan ser reparados una vez dejan de funcionar.
  • Aprovechamiento energético: Algunas formas de aprovecharlo es usar bombillas de bajo consumo, buen aislamiento del lugar de trabajo, uso de termostatos, fomento del transporte público…

La economía circular es el modelo de negocio al que todas las empresas deben dirigirse en los próximos años para reducir el impacto sobre el medio ambiente y conseguir un mejor rendimiento. Te invitamos a dar el primer paso con nosotros, mediante el cálculo de tu huella de carbono. ¡Únete al cambio!

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