Tipos de impactos ambientales
Existen hasta siete tipos de impactos ambientales diferentes:
- Positivo o negativo
- Reversible o irreversible
- Directo o indirecto
- Acumulativo o sinérgico
- Actual o potencial
- Temporal o permanente
- Local o diseminado
Los impactos ambientales negativos están directamente relacionados con las actividades del ser humano y cómo se explotan los recursos naturales. La extracción y uso de recursos como la materia prima o los combustibles fósiles conlleva a su vez riesgos como la contaminación, la deforestación o la pérdida de biodiversidad:
- Contaminación ambiental (de la atmósfera, del agua, del suelo, acústica, lumínica…): Un mal uso de los recursos disponibles genera la presencia de componentes nocivos para los seres vivos que afectan a la salud humana y del planeta.
- Deforestación: La eliminación de la vegetación provoca cambios en el clima que acaban convirtiendo el suelo en terreno infértil, perjudicando el hábitat de la zona, la flora y la fauna.
- Pérdida de biodiversidad: La sobreexplotación de los recursos naturales provoca el empobrecimiento de los ecosistemas. Consecuentemente, el hábitat se ve afectado provocando la extinción de algunas especies.
¿Cómo se mide el impacto ambiental?
El bienestar humano está directamente relacionado con la sostenibilidad ambiental. Este hecho demuestra la importancia de medir los efectos de la actividad humana en el entorno. De acuerdo a ciertos indicadores de desarrollo sostenible, se ha creado la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA) que permite medir las consecuencias de nuestra actividad en el ecosistema.
Actualmente, más de 100 países tienen la obligación de evaluar adecuadamente los impactos que cualquier proyecto pueda tener sobre el medio ambiente y las personas.
¿Cómo generar un impacto ambiental positivo?
Según el estudio “2020 Global Consumer Study” realizado por IBM y National retail Federation hay una tendencia de los consumidores por marcas que generan un impacto ambiental positivo. Cerca del 70% de los usuarios estarían dispuestos a pagar más por un producto sostenible. Y un 57% cambiaría sus hábitos para lograr un consumo responsable.
Esto supone una ventaja competitiva para aquellas empresas y profesionales que trabajen en un modelo de producción que favorezca la transición hacia un modelo de negocio sostenible. Con el objetivo de acelerar esta transición la ONU dio a conocer los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que pueden servir como guía para todos aquellos que busquen generar este impacto ambiental positivo.
A continuación, te dejamos 4 ejemplos reales de cómo puedes tener un impacto positivo en el medio ambiente y ayudar a mitigar el cambio climático en la actualidad:
- Reduce tu huella ambiental. Mide tu impacto ambiental y define los objetivos de reducción y neutralidad de carbono.
- Haz uso de energías limpias. Desarrolla e implementa un sistema de energía eficiente que produzca un impacto ecológico en el medio ambiente mínimo o nulo durante sus procesos de extracción y generación.
- Fomenta la economía circular. Reutilizar, reparar y reciclar materiales y productos existentes permite alargar el ciclo de vida de los productos optimizando la extracción y uso de los recursos naturales.
- Educación ambiental. Las empresas e instituciones tienen la responsabilidad de ayudar a concienciar sobre los problemas ambientales y ofrecer herramientas para tomar decisiones y adoptar medidas responsables con el entorno.
La acción individual es clave para combatir el cambio climático, pero no es suficiente. Genera un impacto positivo considerando resultados de triple impacto, ambiental, social y económico, en tus decisiones.