Viajar y ser sostenible son compatibles. En los últimos años la industria turística está avanzando hacia modelos de negocio más sostenibles. Sin embargo, muchos viajeros escogen los destinos más comunes favoreciendo el turismo en masa.
Una forma de apoyar la lucha contra el cambio climático es realizar un turismo responsable.
¿Qué es el turismo responsable?
La Organización Mundial del Turismo (OMT), considera como “sostenible“ aquel turismo que ofrece un uso óptimo a los recursos medioambientales. Para ello es necesario mantener los procesos que ayudan a conservar la biodiversidad y los recursos naturales. Para poder lograr que el turismo sea responsable se debe tener en cuenta estos tres pilares:
- Optimizar los recursos medioambientales
- Proteger el patrimonio cultural y natural
- Proporcionar beneficios económicos y sociales
Consejos para disfrutar de una Semana Santa sostenible
Las alternativas para viajar de forma sostenible y respetuosa con el medio ambiente son cada vez más numerosas. A continuación, podrás conocerlas:
Según un estudio realizado por el Global Sustainable Tourism Council (GSTC) y el Instituto Tecnológico Hotelero (ITH), el 90% de los viajeros encuestados elegiría un hotel sostenible para alojarse y el 34% de ellos estaría dispuesto a pagar más por este tipo de alojamiento.
Algunos factores que puedes tener en cuenta a la hora de escoger tu alojamiento es elegir sitios donde se fomente la economía local como los paradores u hoteles donde usen medidas tales como: instalaciones de energía renovable, iluminación de bajo consumo o LED, puntos de recarga de vehículos eléctricos, proximidad a las zonas locales…
Di “si” al transporte sostenible: El avión es el medio de transporte que mayor huella de carbono produce. Ante la amplia variedad de opciones disponibles para viajar recomendamos el tren, ya que suele ser el medio más económico y respetuoso. El autobús o los coches compartidos a través de aplicaciones de carsharing son otra alternativa para ser más sostenible. Si no es posible evitar los aviones, viaja con compañías que tengan programas de compensación de emisiones.
Conoce el mercado local y dejar atrás el fast food: Se trata de una oportunidad para disfrutar de comida de temporada y comer alimentos auténticos. Un manjar que los profesionales del sector realizan incluso para preparar en sus propios restaurantes.
Déjate llevar: Tenemos la tendencia de ir siempre corriendo a los mismos sitios, a las aglomeraciones donde todo el mundo va, lo que llamamos turismo masivo. Para poder descubrir rincones mágicos y enriquecer tu experiencia, párate a admirar la belleza del paisaje. Disfruta de tu viaje pateando, es como de verdad se conoce una ciudad y su cultura.
Utiliza productos reutilizables: Siempre que hacemos turismo solemos pasar mucho calor y comprar botellas de agua y comida envuelta en plásticos. Se previsor y mete en tu maleta una botella de aluminio o cristal y una bolsa de tela reutilizable, ¡pesa menos y es más cómoda para transportar!
Apoya la economía local: Adquirir productos artesanos y souvenirs fabricados localmente contribuye en la economía local, y por tanto, al mantenimiento del patrimonio cultural auténtico favoreciendo a los residentes locales.
Ahora que ya sabes lo que tienes que hacer antes de escoger un viaje, acuérdate de apagar o dejar en stand by los dispositivos electrónicos cuando salgas. ¡El planeta lo agradecerá y tu bolsillo también!